Caída del cabello: manifestación, causas y prevención
Una muda del cabello se considera normal cuando la caída se limita a unos cien cabellos al día. A lo largo de la vida, el cabello crece, se cae y vuelve a crecer unas veinte veces. Cada ciclo, sobre todo entre las mujeres, puede durar hasta seis años y si se produce una caída de cabello en este plazo, ésta debe considerarse absolutamente fisiológica.
FISIOLOGÍA Y PATOLOGÍA DE LA CAÍDA
Con el programa de análisis tricológico de Cesare Ragazzi Laboratories, gracias al Tricotest® y a una visita dermatológica, se puede examinar la caída del cabello y comprender si se trata de una pérdida normal o de un problema de otro tipo.
Un aumento de los cabellos que se caen, en particular en las estaciones de la primavera y del otoño, no debe hacer pensar en nada patológico ni, por tanto, despertar preocupación, hasta que la cantidad de cabello en caída sea proporcional a su densidad habitual.
Se puede empezar a pensar que nos enfrentamos a una anomalía en la caída de cabello cuando su cantidad en fase de caída es visiblemente superior respecto a la cantidad de cabellos en fase de crecimiento. Ocurre a menudo que esta caída de cabello anómala venga producida por factores temporales, que pueden ser ambientales o relacionados con estrés y mala alimentación, pero si nos observamos de que la pérdida supera un tiempo limitado, conviene buscar causas más profundas.
Salvo situaciones en las que los problemas de pérdida de cabello se debaN a causas médicas constatadas con exámenes clínicos, hacer un examen del cabello, como por ejemplo el Tricotest® de Cesare Ragazzi Laboratories, resulta útil para descubrir la presencia de anomalías en el cuero cabelludo (por ejemplo, caspa o seborrea que influyen en la salud y la caída del cabello y, como consecuencia, puede ser importante para dar indicaciones sobre cómo actuar con tratamientos localizados que sitúen la caída dentro de los límites fisiológicos).
Conocer la caída del cabello y prevenirla.
- En mujeres y hombres, la caída del cabello se produce de maneras diferentes: las entradas son típicas de la pérdida y de la escasez de cabello en el hombre, mientras en mujeres la escasez se produce con más frecuencia por todo el cuero cabelludo.
- Cuando la caída del cabello, incluso anómala, resulta reversible, se habla de efluvio telógeno
- El defluvio telógeno, por su parte, es una caída definitiva del cabello que produce una pérdida progresiva del folículo piloso
- Cuando el cabello se cae de forma más abundante pero por causas fisiológicas en primavera o en otoño estamos frente a una caída de cabello estacional
- Cada vez hay más personas muy jóvenes que sufren calvicie precoz, haciendo que este fenómeno de la caída juvenil esté muy extendido
- La pérdida de cabello puede ser fuente de problemas psicológicos que pueden llegar a causar depresión
- Entre las posibles causas de caída de cabello, podemos incluir el picor del cuero cabelludo, cuando éste viene seguido de patologías particulares
- La caída del cabello en hombres se evalúa con la escala Hamilton-Norwood, que mide las entradas y la escasez progresiva
- La caída del cabello en mujeres se evalúa con la escala Ludwig, que mide la escasez
- Cuando la caída del cabello es hereditaria, se habla de alopecia androgenética o calvicie
- Si la pérdida de cabello viene provocada por el exceso de sebo que se deposita en el cuero cabelludo, estamos frente a una alopecia seborreica
- Fuertes y prolongados periodos de estrés pueden desestabilizar también el cabello, provocando una verdadera alopecia por estrés (psicógena)
- Se habla de alopecia por tricotilomanía cuando el cabello se cae por continuas tracciones y tirones debidos a la costumbre de arrancárselos continuamente
- Intervenir con los remedios adecuados y en los plazos correctos es fundamental para resolver (o limitar) las consecuencias de la caída del cabello.
Existen soluciones y tratamientos de tipos diferentes, que van desde los remedios estéticos de espesamiento, pasando por las curas farmacológicas, hasta los productos y tratamientos tricológicos como los de la línea CRLab.
- Nuestros expertos están a su disposición parar responder a todas sus dudas y preguntas sobre la caída del cabello y sobre cómo evitarla, manteniendo cutis y cabello sanos.
CAÍDA DEL CABELLO
Con el término «caída estacional del cabello» nos referimos al aumento de la caída del cabello durante el periodo primaveral (meses de abril y mayo) y el periodo otoñal (meses de septiembre a noviembre).
Esto afecta a ambos sexos por igual.
Las causas que provocan la caída estacional del cabello aún no son muy claras.
Podemos reconocer tres orígenes diferentes:
1) muchos expertos en tricología reconocen una herencia genética conectada con el proceso estacional de muda del pelo característico de los mamíferos;
2) otros expertos, sin embargo, sostienen que se debe a la variación de la relación entre horas de luz y horas de oscuridad que, influyendo en el equilibrio hormonal, causaría la caída del cabello;
3) otros tricológos, por último, dan una explicación más vinculada con factores de tipo psicosociológico del fenómeno, asociando el aumento de la caída del cabello con el retorno a la vida contaminada de la ciudad tras el periodo de vacaciones de verano, caracterizada por el estrés, la vuelta al trabajo, ritmos frenéticos de vida y la presencia de la contaminación atmosférica.
Por otra parte, podemos afirmar que hay estudios científicos que declaran haber encontrado la causa de la caída estacional del cabello. Considerando que cualquier daño o beneficio al cuero cabelludo se traduce, tras tres meses, en una caída o en una mejora, en lo relativo a la caída otoñal se hace referencia al exceso de sol tomado en la cabeza en los cálidos meses de verano (los rayos de sol hacen que se acumulen radicales libres que dañan los bulbos de los cabellos y, por tanto, son responsables de la caída tras unos tres meses; es decir, en otoño); respecto a la caída primaveral, por su parte, se piensa en el exceso de frío que sufre la cabeza en invierno que, provocando una vasoconstricción en el cuero cabelludo, daña los bulbos de los cabellos, produciendo una caída tres meses después; es decir, en primavera. Independientemente de la causa de la caída estacional del cabello, su aumento en el periodo primaveral y otoñal se considera un fenómeno fisiológico de «muda» natural.
Es sabido que los cabellos de los seres humanos poseen un ciclo de crecimiento que puede durar entre dos y seis años. El cabello se renueva en torno a una veintena de veces a lo largo de la vida. Esto quiere decir que cada cabello cae y vuelve a crecer en torno a veinte veces antes de morir definitivamente por el envejecimiento del folículo piloso. El periodo primaveral y el otoñal no hacen más que acelerar, debido al cambio de clima, el ciclo de vida del cabello y su renovación fisiológica.
Después de todo lo expuesto, procede hacer una distinción entre pérdida estacional del cabello y pérdida de cabello anómala o patológica.
Para la mayoría de la gente, perder cabello es una condición que viven con ansiedad y depresión. Todo esto es natural que se produzca en los periodos primaveral y otoñal. En estas estaciones, incluso en las personas que tienen abundantes melenas, la caída del cabello puede superar de lejos los cien cabellos al día. En estos casos, sólo se caen los cabellos que están en la fase telógena (se habla de efluvio telógeno estacional); es decir, los que están cerca en ese momento del final de su ciclo de crecimiento.
De hecho, sus folículos ya están trabajando para producir nuevos cabellos. No obstante, también se dan casos clínicos en los que el incremento natural de la caída estacional esconde un problema real de crecimiento del cabello, haciendo difícil de esta forma distinguir entre caída normal y caída anómala del cabello. Durante el periodo otoñal, la renovación de tensiones psicofísicas debidas al inicio del año laboral repercute en la salud del cabello. Si dicho estrés se enmarca en una situación de cabello ya débil, el riesgo de que se active un proceso de caída excesivo y anormal del cabello resulta ser muy alto.
También hay señales que alertan sobre qué pérdida de cabello tiene características patológicas, como la presencia de picor o dolor en el cuero cabelludo. Debemos señalar que, a menudo, en los meses en los que la caída aumenta en mucha gente, se asiste a un aumento de la pérdida de cabello ya existente.
En estas situaciones, siempre es necesario acudir al tricólogo, el cual, estudiando el caso particular, determinará las causas de la caída excesiva y establecerá una terapia correcta para ponerle remedio.
CAÍDA DE CABELLO POR ESTRÉS
Aunque a día de hoy no haya pruebas experimentales que certifiquen la pérdida de cabello por estrés, muchos pacientes se quejan a menudo de esta situación.
La alopecia psicógena no es más que un trastorno de origen psicosomático determinado por el estrés y por tensiones nerviosas.
La caída de cabello por estrés se diferencia con claridad respecto a la alopecia por tricotilomanía, la cual, a pesar de tener también causas de tipo psicológico, es un trastorno del comportamiento y, por tanto, no tiene origen psicosomático.
Recientes estudios han destacado que una carga importante y repetida de estrés induce tanto al hipotálamo como a la hipófisis a liberar hormonas corticotropas que entran en circulación, afectando a los queratinocitos, los fibroblastos, las células inmunitarias y los sebocitos, células responsables del crecimiento del cabello.
Cada estrés o hecho estresante, tanto de naturaleza endógena (interna) como de naturaleza exógena (externa), conlleva una reacción de tipo psicológico y de tipo físico que se manifiesta con la caída del cabello.
La alopecia por estrés en mujeres se manifiesta con la escasez de cabello en todo el cuero cabelludo y, sobre todo, en el área central que conecta la fijación frontal con el vértice de la cabeza.
Sin embargo, la alopecia por estrés en hombres, además de una escasez que afecta a todo el cuero cabelludo, se caracteriza por las entradas que aumentan con velocidad al persistir y agravarse los factores que las han provocado.
La sintomatología de la alopecia por estrés (tanto la femenina como la masculina) se suele confundir con la alopecia androgenética. Esta última sólo se descarta cuando se demuestra que el paciente examinado no tiene herencia de esta patología.
Tampoco el diagnóstico diferencial entre alopecia seborreica y por estrés es simple.
En ambas, se observa una producción excesiva de sebo, pero, mientras en la alopecia seborreica la seborrea es causa directa de la caída del cabello, en la alopecia por estrés la seborrea, si está presente, representa una causa indirecta provocada por el estrés.
Los síntomas de la alopecia psicógena son los siguientes: pérdida de cabello, seborrea o hipersecreción sebácea, dematitis seborreica, picor en todo el cuero cabelludo y tricodinia.
Es importante, en los casos de alopecia por estrés, eliminar cualquier fuente de estrés que provoque la pérdida de cabello mediante el alejamiento, si la causa es externa, o la psicoterapia, si la fuente en un inconveniente interior.
Las curas y las terapias para el cabello que se cae o que se estropea (alopecia, efluvios y defluvios) pueden durar mucho y requerir gran fuerza de voluntad y mucha constancia.
Podemos afirmar que la alopecia por estrés no es irreversible, pero es muy difícil de curar. De hecho, las personas particularmente ansiosas difícilmente se serenarán y reducirán el estrés, que es la fuente y el origen de la caída del cabello.
Además de intentar reducir o bloquear las causas psicológicas que originan el estrés, se pueden prescribir terapias y curas médicas y tricológicas anticaída que contrarresten los síntomas y las causas indirectas. Por ejemplo, terapias contra la seborrea sirven para reducir estas secreciones que, de otra forma, obstruirían los bulbos pilosos, favoreciendo la caída del cabello.
Resultan especialmente útiles para el crecimiento del cabello las terapias láser y de rayos infrarrojos.
Éstas tienen la función de estimular el folículo piloso, agilizando el paso de las sustancias nutritivas por los bulbos pilosos a los cabellos, reforzándolos y protegiéndolos de esta forma de la caída precoz. En todo caso, son importantes la visita tricológica, el examen del cabello y el tricograma.